Tras una larga bajada con bastantes curvas se encuentra en una pequeña "cala". Donde podemos contemplar la naturaleza de la costa de Dexo así como numerosos barquitos y mejilloneras con la que pescan el marisco y el pescado.
Después de ver el puerto de Lorbé, vamos a visitar el puerto de Dexo, que no es un puerto donde haya muchos barcos, es más, no hay ninguno, pero es una cala preciosa entre bosques y rocas acantiladas.
En este puerto, podemos ir por una ruta por el bosque que desemboca en el anterior mencionado Seixo Branco, además de que tiene una placita con delfines de piedra, un sitio muy bonito, además esta acondicionado para hacer picnics.
Al terminar nuestra visita, regresamos al hotel a recoger nuestras cosas porque nuestro viaje se acaba :(
¡Yo también me he hecho fotos con esos delfines! Al verlo, no he podido evitar comentártelo.
ResponderEliminarSaludos.